"LOS MEXICANOS FUMAN MUCHO"
"LOS MEXICANOS FUMAN MUCHO"
Con este comentario dio arranque un reportaje en el noticiero de Javier Alatorre hace dos días. Pareciera, por el arranque de tan conocido personaje que los mexicanos somos los únicos en el mundo que fumamos como desesperados. Sólo faltó acompañaran tal trabajo de investigación con algo así como: "Los chinos fuman poco". Se habló de manera muy soslayada del combate al tabaquismo en Francia, pero, nunca, ni de relajo se dijo los franceses también fuman como si tuvieran a un hijo preso.
¡TODO EL MUNDO FUMA MUCHO!
Realmente es feo cómo se trata de crear impacto sobre determinado trabajo informativo apelando a la falta de información del receptor de tal información, así como apelando al síndrome de Quetzalcóatl de nosotros los mexicanos. Pues para empezar, en el mundo entero no somos los mexicanos lo únicos que "fumamos mucho". En los pocos países a donde he podido ir, si algo me he encontrado es con que la población en general, pero sobre todo lo jóvenes ¡Fuman con desesperación!
En España, en la plaza del Sol, nadamás hay que estar ahí un fin de semana, que no obstante el sitio se barre todos los días, ya entrada la noche hay colillas como confeti en el carnaval en las calles de Veracruz.
¡EL MUNDO ENTERO FUMA Y MUCHO!
En Francia, la gente fuma, fuma, fuma y vuelve a fumar. En Cuba, lugar en donde se consume buen tabaco, sobre todo porque los cigarrillos procedentes del extranjero no están accesibles al pueblo ¡Cómo fuman los cubanos sus pequeños cigarros de tabaco vernáculo! Pero ¡Fuman! ¡Híjole!, ahora que me acuerdo, en donde también fuman, fuman y vuelven a fumar es en todo Checoslovaquia y en todo Polonia ¡Cómo fuma la gente! Y abarco ambos territorios en virtud de que el viaje de Praga a Cracovia lo hice por tren y siempre la gente se veía fumando. Por lo tanto, no es nada extraño el que los mexicanos fumemos ¡Coño! Pues si nos vamos a gringolandia ¡Pa'su mecha!, con todo y los programas dedicados a persuadir a la gente de dejar de fumar ¡Cómo fuman los gringos! Y eso es lo menos, pues además se meten de todo, desde "pericazos", inyecciones, pastillas, etc., etc. Que el cigarro es lo menos dañino.
CUANDO EL TABACO GUSTA ¡QUE RICO ES FUMAR!
Yo, tal y como se los he platicado ¡Me encanta fumar! Y dejé de fumar cigarros porque deploré cómo terminaba luego con la ropa quemada, pues el viento luego le echa a uno encima la brasa del cigarro y ahí va un boquete, ya bien en la camisa o ya bien en el pantalón. Recuerdo cuando en una ocasión, llevando el brazo fuera del coche, yo en todo estilacho, el viento arrojó la candela (para utilizar un término alvaradeño y cubano a extremo) hacia atrás del carro, ahí me tienen parando de emergencia para sacar la brasa del auto, no obstante mi reacción inmediata, el asiento trasero terminó con una muy notable quemadura.
ESO SI, HAY QUE ASUMIR LAS CONSECUENCIAS
Y bueno, ahí comencé a concientizarme debía dejar el cigarro, pero, como soy bastante adicto al tabaco, lo cambié por el puro. Por lo que ahora, en mis días de descanso me "chuto" un sendo puro gozando de manera inenarrable cada bocanada que doy de humo y el sabroso sabor a tabaco del que se me impregna la boca ¿Que me voy a morir tal vez de cáncer o enfisema pulmonar? Hay todas la posibilidades, pero, el haber alcanzado y rebasado la quinta década de vida, como que me otorga esto ciertos privilegios y uno de ellos es hacer lo que se venga en gana sin perjudicar a terceros.
SI NOS VAMOS A LOS HECHOS, MAS DAÑOS CAUSA LA TV
Fumar es un deleite para quienes realmente disfrutamos el tabaco, por lo tanto, bien haría el señor Alatorre incluir un reportaje sobre el brutal enajenamiento de que es objeto la humanidad entera por motivos de ver tanta televisión, así como los daños irreversibles que la radiación emanada de la muy bien llamada "caja boba" causa a los millones de televidentes año con año.
Incluso, la enajenación y daño cultural que produce la TV, producto de la mediatización y pésima calidad de sus programas ¡En el mundo entero!, causan mayor daño que todos los cigarrillos fumados en todo el orbe desde que se industrializara la hoja del tabaco.
EN EL RESTO DEL MUNDO SE FUMA MAS QUE EN MEXICO
Pero, no nos separemos del tema, el meollo de este asunto es la forma en como es presentado el reportaje, pues sin decirlo, pareciera los mexicanos somos el pueblo que más fuma en la Tierra ¡Mentira!, pues sin exagerar, les apuesto que con todo y los programas fallidos para contrarrestar el tabaquismo, en los EUA, Francia y España se fuma más que en nuestro país.
QUE DEJE DE ANUNCIAR TABACO Y ALCOHOL LA TV
Lo que deberían de hacer los legisladores es hacerle caso a Javier Alatorre y procurar legislar en el sentido de sacar de la Televisión todos los comerciales sobre alcohol y tabaco, pues están diseñados los anuncios en tal forma que los televidentes son incitados a consumir. Esto si es grave, pues forma parte del control mental que ejerce el medio televisivo sobre la mente del televidente. Lo cual es parte de ese enajenamiento del que les hablo, pero, como esto va en contra de los intereses de las televisoras, entra en vigor y vigencia el principio del Monje Loco: "Nadie sabe y nadie supo la verdadera historia del enajenamiento humano a través de la TV".
Correo: losbuenosdias@gmail.com
Con este comentario dio arranque un reportaje en el noticiero de Javier Alatorre hace dos días. Pareciera, por el arranque de tan conocido personaje que los mexicanos somos los únicos en el mundo que fumamos como desesperados. Sólo faltó acompañaran tal trabajo de investigación con algo así como: "Los chinos fuman poco". Se habló de manera muy soslayada del combate al tabaquismo en Francia, pero, nunca, ni de relajo se dijo los franceses también fuman como si tuvieran a un hijo preso.
¡TODO EL MUNDO FUMA MUCHO!
Realmente es feo cómo se trata de crear impacto sobre determinado trabajo informativo apelando a la falta de información del receptor de tal información, así como apelando al síndrome de Quetzalcóatl de nosotros los mexicanos. Pues para empezar, en el mundo entero no somos los mexicanos lo únicos que "fumamos mucho". En los pocos países a donde he podido ir, si algo me he encontrado es con que la población en general, pero sobre todo lo jóvenes ¡Fuman con desesperación!
En España, en la plaza del Sol, nadamás hay que estar ahí un fin de semana, que no obstante el sitio se barre todos los días, ya entrada la noche hay colillas como confeti en el carnaval en las calles de Veracruz.
¡EL MUNDO ENTERO FUMA Y MUCHO!
En Francia, la gente fuma, fuma, fuma y vuelve a fumar. En Cuba, lugar en donde se consume buen tabaco, sobre todo porque los cigarrillos procedentes del extranjero no están accesibles al pueblo ¡Cómo fuman los cubanos sus pequeños cigarros de tabaco vernáculo! Pero ¡Fuman! ¡Híjole!, ahora que me acuerdo, en donde también fuman, fuman y vuelven a fumar es en todo Checoslovaquia y en todo Polonia ¡Cómo fuma la gente! Y abarco ambos territorios en virtud de que el viaje de Praga a Cracovia lo hice por tren y siempre la gente se veía fumando. Por lo tanto, no es nada extraño el que los mexicanos fumemos ¡Coño! Pues si nos vamos a gringolandia ¡Pa'su mecha!, con todo y los programas dedicados a persuadir a la gente de dejar de fumar ¡Cómo fuman los gringos! Y eso es lo menos, pues además se meten de todo, desde "pericazos", inyecciones, pastillas, etc., etc. Que el cigarro es lo menos dañino.
CUANDO EL TABACO GUSTA ¡QUE RICO ES FUMAR!
Yo, tal y como se los he platicado ¡Me encanta fumar! Y dejé de fumar cigarros porque deploré cómo terminaba luego con la ropa quemada, pues el viento luego le echa a uno encima la brasa del cigarro y ahí va un boquete, ya bien en la camisa o ya bien en el pantalón. Recuerdo cuando en una ocasión, llevando el brazo fuera del coche, yo en todo estilacho, el viento arrojó la candela (para utilizar un término alvaradeño y cubano a extremo) hacia atrás del carro, ahí me tienen parando de emergencia para sacar la brasa del auto, no obstante mi reacción inmediata, el asiento trasero terminó con una muy notable quemadura.
ESO SI, HAY QUE ASUMIR LAS CONSECUENCIAS
Y bueno, ahí comencé a concientizarme debía dejar el cigarro, pero, como soy bastante adicto al tabaco, lo cambié por el puro. Por lo que ahora, en mis días de descanso me "chuto" un sendo puro gozando de manera inenarrable cada bocanada que doy de humo y el sabroso sabor a tabaco del que se me impregna la boca ¿Que me voy a morir tal vez de cáncer o enfisema pulmonar? Hay todas la posibilidades, pero, el haber alcanzado y rebasado la quinta década de vida, como que me otorga esto ciertos privilegios y uno de ellos es hacer lo que se venga en gana sin perjudicar a terceros.
SI NOS VAMOS A LOS HECHOS, MAS DAÑOS CAUSA LA TV
Fumar es un deleite para quienes realmente disfrutamos el tabaco, por lo tanto, bien haría el señor Alatorre incluir un reportaje sobre el brutal enajenamiento de que es objeto la humanidad entera por motivos de ver tanta televisión, así como los daños irreversibles que la radiación emanada de la muy bien llamada "caja boba" causa a los millones de televidentes año con año.
Incluso, la enajenación y daño cultural que produce la TV, producto de la mediatización y pésima calidad de sus programas ¡En el mundo entero!, causan mayor daño que todos los cigarrillos fumados en todo el orbe desde que se industrializara la hoja del tabaco.
EN EL RESTO DEL MUNDO SE FUMA MAS QUE EN MEXICO
Pero, no nos separemos del tema, el meollo de este asunto es la forma en como es presentado el reportaje, pues sin decirlo, pareciera los mexicanos somos el pueblo que más fuma en la Tierra ¡Mentira!, pues sin exagerar, les apuesto que con todo y los programas fallidos para contrarrestar el tabaquismo, en los EUA, Francia y España se fuma más que en nuestro país.
QUE DEJE DE ANUNCIAR TABACO Y ALCOHOL LA TV
Lo que deberían de hacer los legisladores es hacerle caso a Javier Alatorre y procurar legislar en el sentido de sacar de la Televisión todos los comerciales sobre alcohol y tabaco, pues están diseñados los anuncios en tal forma que los televidentes son incitados a consumir. Esto si es grave, pues forma parte del control mental que ejerce el medio televisivo sobre la mente del televidente. Lo cual es parte de ese enajenamiento del que les hablo, pero, como esto va en contra de los intereses de las televisoras, entra en vigor y vigencia el principio del Monje Loco: "Nadie sabe y nadie supo la verdadera historia del enajenamiento humano a través de la TV".
Correo: losbuenosdias@gmail.com
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