VAGARON POR EL MUNDO, SIN POSEER TIERRA ALGUNA
VAGARON POR EL MUNDO, SIN POSEER TIERRA ALGUNA
Una vez desperdigados por todo lo que fuera el imperio romano en la cuenca del Mediterráneo, además de una fracción de lo que hoy es parte del territorio de Alemania, toda la península Ibérica, incluida Francia y buena parte de la hoy Inglaterra, jamás pudieron volver a recuperar su territorio los hebreos.
Podemos decir que durante el imperio romano bajo el llamado paganismo o politeísmo que prevalecía en éste, lo descendientes de Isaac pudieron vivir un tanto en paz; pero, en cuanto el emperador Constantino, en 312, una vez ganada la batalla a su competidor por el mando en el imperio, Magencio, utilizando la ya fuerte presencia del cristianismo, que hasta ese entonces era considerada una religión prohibida y perseguida, pero, sabedor que en gran parte de sus ejércitos los soldados eran cristianos, se aventó la jugada política de la noche previa a la batalla, mandar pintar en los escudos de sus combatientes el signo de la cruz, con la leyenda bajo ésta de: "in hoc signo vincis" (bajo este signo vencerás"; -cuando que Jesús ni en los tormentos más espantosos de la crucifixión emitió siquiera el más leve señalamiento a nadie-), que según esto había soñado el emperador la noche anterior a la batalla, que a la hora del combate los cristianos de "closet" decidieron salir del mismo y llenos de furor al ver el signo con el que se identificaban y sobre todo la leyenda, se lanzaron con todo contra el enemigo y les dieron la mayor partida de mother que se puedan ustedes imaginar; obvio, Constantino fue el dueño del Imperio. Entonces, a través del edicto de Milán, en 313 establece la libertad de la religión. Les cuento esto en función a que junto con el triunfo del cristianismo comenzó el verdadero calvario para la raza adámica por aquello de que ellos habían "matado a Cristo".
"¡QUE CAIGA SU SANGRE SOBRE NOSOTROS Y NUESTROS HIJOS!"
A la caída del imperio romano y la consecuente formación de los reinos que dieron como resultado la formación de las actuales naciones europeas, los judíos se encontraban viviendo en todas las ciudades del continente en barrios que fueron luego conocidos como juderías (esto en España y lógico, sus equivalentes en las otras naciones). Y les comenzó a ir verdaderamente como en feria los judíos, sobre todo por la muy parcial interpretación de las Sagradas Escrituras en aquello de: "¡Que su sangre caiga sobre nosotros y nuestros hijos!" (Mateo 27 : 25).
POR MERAS DISPOSICIONES BIBLICAS, LOS JUDÍOS CONTROLAN LA BANCA
Pues ahí tienen ustedes que en virtud a las disposiciones e interpretaciones del Antiguo y Nuevo Testamento y al espíritu de sobrevivencia que desarrollaron los judíos por la forma en como fueron perseguidos y vejados ¡Acumularon el capital! ("A tu hermano no le prestarás con usura de dinero, ni de comestibles, ni de ninguna otra cosa que se acostumbre exigir réditos. A un extraño sí podrás exigirle rédito. -Deuteronomio 23: 19 y 20.- ), lo que a los cristianos se les tenía prohibido ya entonces por la Santa Madre Iglesia Católica Apostólica y Romana ("Haced para vosotros unas bolsas que no se hagan viejas. Reunid un tesoro que no se agote, allá en los cielos, allá donde no llega el ladrón, ni destruye la polilla: porque ahí donde esté vuestro tesoro, ahí mismo estará vuestro corazón", Lucas 12: 33 y 34), por lo que la Iglesia fue la única que podía manejar las grandes riquezas que le dejaban en heredad la feligresía, pues particular cristiano que era sorprendido haciéndole al agio debía rendir cuentas a la pía institución de la Santa Inquisición y perderlo todo, comenzando por la vida. De ahí vienen los mecenazgos de gente como los Médicis, que patrocinaban las bellas artes y los protegidos debían pintar o esculpir mayoritariamente figuras sacras.
SIGUIERON SIENDO PERSEGUIDOS
Pero, sin hacer crítica alguna a nadie, salvo los relatos objetivos de la historia, el imperio romano es dividido en el de Oriente y Occidente, el primero con su sede en Constantinopla (hoy en Turquía) y la última en la "Ciudad Eterna", la siempre viva y bella Roma. Todo se fue desmoronando y los llamados lugares santos fueron ocupados por los árabes o musulmanes, dando esto lugar a las tristemente conocidas Cruzadas, que jamás lograron recuperar nada, pero eso sí, causaron un horror tremendo entre los bandos en pugna. Jerusalén se mantuvo siempre en manos musulmanas. A la caída del Imperio de Oriente en 1453, todo pasa a ser parte del imperio otomano con sede entonces en la hoy Turquía. Y, los judíos siguieron sin poder retomar y retornar a su territorio. (to be continued)
http: //losbuenosdias.blogspot.com
correo: losbuenosdias @email.com
Comparte fotos y videos mientras chateas en Messenger.
Una vez desperdigados por todo lo que fuera el imperio romano en la cuenca del Mediterráneo, además de una fracción de lo que hoy es parte del territorio de Alemania, toda la península Ibérica, incluida Francia y buena parte de la hoy Inglaterra, jamás pudieron volver a recuperar su territorio los hebreos.
Podemos decir que durante el imperio romano bajo el llamado paganismo o politeísmo que prevalecía en éste, lo descendientes de Isaac pudieron vivir un tanto en paz; pero, en cuanto el emperador Constantino, en 312, una vez ganada la batalla a su competidor por el mando en el imperio, Magencio, utilizando la ya fuerte presencia del cristianismo, que hasta ese entonces era considerada una religión prohibida y perseguida, pero, sabedor que en gran parte de sus ejércitos los soldados eran cristianos, se aventó la jugada política de la noche previa a la batalla, mandar pintar en los escudos de sus combatientes el signo de la cruz, con la leyenda bajo ésta de: "in hoc signo vincis" (bajo este signo vencerás"; -cuando que Jesús ni en los tormentos más espantosos de la crucifixión emitió siquiera el más leve señalamiento a nadie-), que según esto había soñado el emperador la noche anterior a la batalla, que a la hora del combate los cristianos de "closet" decidieron salir del mismo y llenos de furor al ver el signo con el que se identificaban y sobre todo la leyenda, se lanzaron con todo contra el enemigo y les dieron la mayor partida de mother que se puedan ustedes imaginar; obvio, Constantino fue el dueño del Imperio. Entonces, a través del edicto de Milán, en 313 establece la libertad de la religión. Les cuento esto en función a que junto con el triunfo del cristianismo comenzó el verdadero calvario para la raza adámica por aquello de que ellos habían "matado a Cristo".
"¡QUE CAIGA SU SANGRE SOBRE NOSOTROS Y NUESTROS HIJOS!"
A la caída del imperio romano y la consecuente formación de los reinos que dieron como resultado la formación de las actuales naciones europeas, los judíos se encontraban viviendo en todas las ciudades del continente en barrios que fueron luego conocidos como juderías (esto en España y lógico, sus equivalentes en las otras naciones). Y les comenzó a ir verdaderamente como en feria los judíos, sobre todo por la muy parcial interpretación de las Sagradas Escrituras en aquello de: "¡Que su sangre caiga sobre nosotros y nuestros hijos!" (Mateo 27 : 25).
POR MERAS DISPOSICIONES BIBLICAS, LOS JUDÍOS CONTROLAN LA BANCA
Pues ahí tienen ustedes que en virtud a las disposiciones e interpretaciones del Antiguo y Nuevo Testamento y al espíritu de sobrevivencia que desarrollaron los judíos por la forma en como fueron perseguidos y vejados ¡Acumularon el capital! ("A tu hermano no le prestarás con usura de dinero, ni de comestibles, ni de ninguna otra cosa que se acostumbre exigir réditos. A un extraño sí podrás exigirle rédito. -Deuteronomio 23: 19 y 20.- ), lo que a los cristianos se les tenía prohibido ya entonces por la Santa Madre Iglesia Católica Apostólica y Romana ("Haced para vosotros unas bolsas que no se hagan viejas. Reunid un tesoro que no se agote, allá en los cielos, allá donde no llega el ladrón, ni destruye la polilla: porque ahí donde esté vuestro tesoro, ahí mismo estará vuestro corazón", Lucas 12: 33 y 34), por lo que la Iglesia fue la única que podía manejar las grandes riquezas que le dejaban en heredad la feligresía, pues particular cristiano que era sorprendido haciéndole al agio debía rendir cuentas a la pía institución de la Santa Inquisición y perderlo todo, comenzando por la vida. De ahí vienen los mecenazgos de gente como los Médicis, que patrocinaban las bellas artes y los protegidos debían pintar o esculpir mayoritariamente figuras sacras.
SIGUIERON SIENDO PERSEGUIDOS
Pero, sin hacer crítica alguna a nadie, salvo los relatos objetivos de la historia, el imperio romano es dividido en el de Oriente y Occidente, el primero con su sede en Constantinopla (hoy en Turquía) y la última en la "Ciudad Eterna", la siempre viva y bella Roma. Todo se fue desmoronando y los llamados lugares santos fueron ocupados por los árabes o musulmanes, dando esto lugar a las tristemente conocidas Cruzadas, que jamás lograron recuperar nada, pero eso sí, causaron un horror tremendo entre los bandos en pugna. Jerusalén se mantuvo siempre en manos musulmanas. A la caída del Imperio de Oriente en 1453, todo pasa a ser parte del imperio otomano con sede entonces en la hoy Turquía. Y, los judíos siguieron sin poder retomar y retornar a su territorio. (to be continued)
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