¡OTRA VEZ DISNEYLANDIA!
¡OTRA VEZ DISNEYLANDIA!
Pues nada, que leyendo la nota periodística en donde se explica que el Secretario de Trabajo y Previsión Social de la Federación, el señor Javier Lozano, cual Zeus tonante ha hablado con excelsitud, firmeza, justicia, vehemencia y en todo momento nimbado de gloria al enunciar que solicitaba se tipificara como delito el trabajo infantil. Y, a esto es lo que yo llamo el que muchos políticos (tal vez por la influencia de Fox), sigan viviendo en un mundo bonito de acuerdo con lo que los rodea. Pues pareciera para ellos el mundo es esa oficina cómoda, muelle, en donde existe todo tipo de accesorios para hacer placentero el trabajo, así como un sin fin de subalternos para "eficientizar" el trabajo. De ahí que se desfacen y salgan con las gracejadas de que todo México debe ser Disneylandia, en donde todos debemos ser muy felices, sin padecimiento alguno, con comida en todos los hogares, oportunidades para todos, un ingreso familiar por demás cómodo, que efectivamente se deba castigar con cárcel a quien emplee a niños.
¡QUE HORROR! LOS INFANTES TRABAJAN POR MERA DIVERSIÓN
Pues los distraen de su desarrollo normal y les impiden jugar, crecer, pero sobre todo, disfrutar de la escuela y de toda esa gama de útiles que les son proporcionados en todo México a los niños en forma gratuita; sus cuadernos, los juegos de geometría, las plumas, lápices, forros para los libros, etc... pero, lo más sorprendente es la cantidad de juguetes que a la vez les son entregados de manera periódica a todos los niños en territorio nacional. Esto es algo así como un fenómeno sociológico que incluso vienen por parte de los países del Primer Mundo a analizar cómo es posible tanta generosidad por parte de un gobierno hacia una población sumida en la miseria, perdón, en la necesidad extrema, en más de un 70%.
Imagino que con esta iniciativa del señor Secretario del Trabajo y Previsión Social todos los niños en todos los cruceros de todas las ciudades del país van a recibir la atención adecuada por parte de la federación, a fin de contar con todos los recursos necesarios para que ellos y sus familias vivan con lo estricto cuando menos.
TODO UN PIRRURIS EL SEÑOR SECRETARIO
Pero, no es mi intención pretender hacerle al irónico, pero, realmente lo expresado por el señor Lozano está desfazado al extremo ¿En que país o mundo vive?; los niños, o sea, aquellos comprendidos desde que pueden andar vendiendo chicles, hasta la edad de catorce años, que es cuando la Ley Federal del Trabajo permite contratar con todas las de la ley a una persona, trabajan en su gran mayoría, sobre todo en el campo. Y, lo hacen los infantes no por diversión o desobediencia, sino para poder llevar un centavo a sus casas y contribuir así a la precaria economía familiar. Y estos, los empleados, son los más afortunados, pues quienes están en las calles vendiendo chicles o limpiando parabrisas, se encuentran expuestos a los peores peligros y excesos por parte de gentes sin escrúpulos.
QUE SE PONGA A TRABAJAR EN FUNCION A LA REALIDAD NACIONAL
Lo que debería hacer el señor Secretario del Trabajo, en lugar de dárselas de contrito y golpe de pecho, es admitir la tremenda desigualdad prevaleciente en el país y la extrema necesidad de brindar las facilidades necesarias para la preservación de los empleos que se están perdiendo precisamente por la falta de capacidad, de gente que como él desempeña un puesto público y quiere arreglar todo mediante la creación de más leyes, cuando lo que el país necesita es menos tramitología y más efectividad por parte de quienes como él, se supone deberían estar trabajando en por la formación de un mejor país y no de una bola de entelequias.
NADA DE MALO TIENE EL QUE LOS NIÑOS TRABAJEN
Que además, el que los niños trabajen no tiene nada de malo, al contrario, deberían estimular el trabajo infantil, obvio, debidamente vigilado, pues por ejemplo, los "cerillos" de los super's, con las propinas llevan muy bien dinero a casa y además se les va fomentando a ellos una disciplina del trabajo. Y, no es por estar en el "yo-yo", quien esto escribe desde los 8 años de edad trabajo, amén de que estudié y trabajé durante la secundaria, bachillerato y la universidad y ¡No me pasó nada!, al contrario, tal actividad contribuyó grandemente a mi formación; por lo tanto, estoy opinando con conocimiento de causa y no como el pirruris del Secretario, que cree el mundo es al más puro estilo Fox-PAN.
http://losbuenosdias.blogspot.com
correo: losbuenosdias@gmail.com
¿Tienes cámara digital, más de una cuenta de email, planeas fiestas o blogueas? Entonces, necesitas Windows Live
Pues nada, que leyendo la nota periodística en donde se explica que el Secretario de Trabajo y Previsión Social de la Federación, el señor Javier Lozano, cual Zeus tonante ha hablado con excelsitud, firmeza, justicia, vehemencia y en todo momento nimbado de gloria al enunciar que solicitaba se tipificara como delito el trabajo infantil. Y, a esto es lo que yo llamo el que muchos políticos (tal vez por la influencia de Fox), sigan viviendo en un mundo bonito de acuerdo con lo que los rodea. Pues pareciera para ellos el mundo es esa oficina cómoda, muelle, en donde existe todo tipo de accesorios para hacer placentero el trabajo, así como un sin fin de subalternos para "eficientizar" el trabajo. De ahí que se desfacen y salgan con las gracejadas de que todo México debe ser Disneylandia, en donde todos debemos ser muy felices, sin padecimiento alguno, con comida en todos los hogares, oportunidades para todos, un ingreso familiar por demás cómodo, que efectivamente se deba castigar con cárcel a quien emplee a niños.
¡QUE HORROR! LOS INFANTES TRABAJAN POR MERA DIVERSIÓN
Pues los distraen de su desarrollo normal y les impiden jugar, crecer, pero sobre todo, disfrutar de la escuela y de toda esa gama de útiles que les son proporcionados en todo México a los niños en forma gratuita; sus cuadernos, los juegos de geometría, las plumas, lápices, forros para los libros, etc... pero, lo más sorprendente es la cantidad de juguetes que a la vez les son entregados de manera periódica a todos los niños en territorio nacional. Esto es algo así como un fenómeno sociológico que incluso vienen por parte de los países del Primer Mundo a analizar cómo es posible tanta generosidad por parte de un gobierno hacia una población sumida en la miseria, perdón, en la necesidad extrema, en más de un 70%.
Imagino que con esta iniciativa del señor Secretario del Trabajo y Previsión Social todos los niños en todos los cruceros de todas las ciudades del país van a recibir la atención adecuada por parte de la federación, a fin de contar con todos los recursos necesarios para que ellos y sus familias vivan con lo estricto cuando menos.
TODO UN PIRRURIS EL SEÑOR SECRETARIO
Pero, no es mi intención pretender hacerle al irónico, pero, realmente lo expresado por el señor Lozano está desfazado al extremo ¿En que país o mundo vive?; los niños, o sea, aquellos comprendidos desde que pueden andar vendiendo chicles, hasta la edad de catorce años, que es cuando la Ley Federal del Trabajo permite contratar con todas las de la ley a una persona, trabajan en su gran mayoría, sobre todo en el campo. Y, lo hacen los infantes no por diversión o desobediencia, sino para poder llevar un centavo a sus casas y contribuir así a la precaria economía familiar. Y estos, los empleados, son los más afortunados, pues quienes están en las calles vendiendo chicles o limpiando parabrisas, se encuentran expuestos a los peores peligros y excesos por parte de gentes sin escrúpulos.
QUE SE PONGA A TRABAJAR EN FUNCION A LA REALIDAD NACIONAL
Lo que debería hacer el señor Secretario del Trabajo, en lugar de dárselas de contrito y golpe de pecho, es admitir la tremenda desigualdad prevaleciente en el país y la extrema necesidad de brindar las facilidades necesarias para la preservación de los empleos que se están perdiendo precisamente por la falta de capacidad, de gente que como él desempeña un puesto público y quiere arreglar todo mediante la creación de más leyes, cuando lo que el país necesita es menos tramitología y más efectividad por parte de quienes como él, se supone deberían estar trabajando en por la formación de un mejor país y no de una bola de entelequias.
NADA DE MALO TIENE EL QUE LOS NIÑOS TRABAJEN
Que además, el que los niños trabajen no tiene nada de malo, al contrario, deberían estimular el trabajo infantil, obvio, debidamente vigilado, pues por ejemplo, los "cerillos" de los super's, con las propinas llevan muy bien dinero a casa y además se les va fomentando a ellos una disciplina del trabajo. Y, no es por estar en el "yo-yo", quien esto escribe desde los 8 años de edad trabajo, amén de que estudié y trabajé durante la secundaria, bachillerato y la universidad y ¡No me pasó nada!, al contrario, tal actividad contribuyó grandemente a mi formación; por lo tanto, estoy opinando con conocimiento de causa y no como el pirruris del Secretario, que cree el mundo es al más puro estilo Fox-PAN.
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