EL DORADO Y LA CACA DEL PERICO
EL DORADO Y LA CACA DEL PERICO
Indiscutiblemente ustedes han de haber ya escuchado la leyenda indígena de El Dorado, nombre y mito que incluso ha dado el nombre a un sin fin de obras y objetos, entre ellos a modelos de automóviles. De acuerdo con nuestros ancestros indígenas, contemporáneos, de nuestros también ancestros españoles (a estas alturas del partido negar el mestizaje, así como la benéfica influencia de la cultura hispana sería no una pifia, sino una testarudez a grado de torpeza supina), como se dieron cuenta lo que los españoles buscaban con tanto afán, que hasta torturaban y mataban para la consecución de tal objeto, que no era otra cosa que ¡Oro!, no tardaron mucho en inventar el mito de señalar hacia el norte la existencia de una gran ciudad construida en oro puro, en donde sus habitantes no hacían otra cosa que cargar y construir todo con oro. Esta fabulosa leyenda dio como consecuencia de que los conquistadores se olvidaran de los paupérrimos conglomerados indígenas en donde llegaban y se lanzaran siempre al norte en busca de tan fabulosa cuanto mítica ciudad. Al ver los aborígenes que tal mentira funcionaba, pareciera se telepatearon la versión a manejar, porque de pronto, conforme llegaban al punto donde se presumía estaba El Dorado (nombre dado por los españoles a tan prodigiosa urbe), los habitantes de dicho lugar los mandaban más al norte. En tal forma, que según dicen los conocedores, hay vestigios de la marcha hispana hasta casi llegar a la hoy zona de Los Grandes Lagos, comarca entre los EUA y el Canadá; lógicamente ¡Nunca encontraron nada!
SEGURAMENTE NADIE QUIERE LA VISITA DE OTRO PRESIDENTE
Por lo tanto, en virtud a lo sufrido por los habitantes de la muy tranquila Mérida, Yucatán, con la "grata visita" de Mr. Bush, no me queda la menor duda no les ha de haber quedado la menor alegría por tal visita, sobre todo por la serie de calamidades que esto trajo, más que nada en el sitio bajo el cual estuvo la ciudad antes y durante la mentada visita. Por lo tanto, ni duda me cabe la próxima realizada por otro Presidente de los EUA al país o de algún Jefe del Ejecutivo del Primer Mundo, los habitantes de todas la ciudades del país indiscutiblemente inventarán algo similar a la leyenda de El Dorado, a fin de que la visita se realice en otro lado pero no en la ciudad designada.
¡HIJOLE! TODO UN ESTADO DE SITIO POR TAN INUTIL VISITA
Pues miren que fue espantosa la experiencia vivida por los "boshitos", imagino hasta sus casas debieron ser cateadas, ya no por los mismos mexicanos de las Guardias Presidenciales, sino por los móndrigos gringos que en búsqueda de "terroristas", deben haber "peinado" toda la ciudad ¡Y la escandalera de los helicópteros, los aviones y toda esa espantosa gama de infraestructura de seguridad presentada para protección de Mr. Bush ¡Qué espantoso! Aquí muy bien podemos aplicar y con mucho lo que dice la Biblia, en Proverbios (17, 1): "Es mejor un bocado de pan seco, pero con tranquilidad, que una casa con infinidad de banquetes donde reine la discordia". Indiscutiblemente un Jefe de Estado debe tener seguridad, pero la de Mr. Bush es como para echarse a correr ¿O no? (Así ha de andar su alma).
AHORA VIENE LA PARTE DE "LA CACA DEL PERICO"
Hasta aquí les dejo la parte del título de la "calumnia" correspondiente a "El Dorado". Arrancando con "La caca del perico", esto último en virtud de que tal y como dice el mexicanísimo dicho respecto a tal producto escatológico del loro: "...ni huele ni apesta". Bueno, pues así fue la visita de Mr. Bush al país, pues no hubo nada extraordinario, como tampoco nada que desde los EUA no haya dicho el mayor entrometido del mundo. Pues lo que dijo, no nos benefició ni nos perjudicó, sino todo lo contrario, pues nada se arregló con lo de la migración, como tampoco nada en contra del consumo de la droga, pues ese es el meollo del problema en el narco ¡La gran adicción de la sociedad gringa por todo lo que sea estupefacientes! Y en virtud de ser el mayor y más rico mercado del mundo en tal materia y tener una muy extensa frontera con nuestro país, la bronca del narco en México es generada precisamente por los mafufos allende la frontera norte. Pero, como son los "ricardos" y los "chicos bien", pues nada, que somos los latinos los que estamos haciendo hasta lo imposible por corromperlos y por eso el problema está en el tráfico, no en el consumo.
VISITA QUE NO SIRVIO PARA NADA, PUES TODO QUEDO IGUAL
En fin, que esta visita no sirvió para maldita la cosa, sino para el fastidio de los habitantes de la Blanca Mérida. E indudablemente para una estrategia electoral en beneficio del Sr. Bush, pues el año entrante hay elecciones en gringolandia y como el voto hispano ya está muy duro, él va a decir que la reforma migratoria no pasó por culpa de los demócratas que son ahora mayoría en el Congreso Norteamericano (Bush es republicano), pero, cuando él tuvo mayoría en el Congreso no hizo nada por la mentada reforma. Por lo tanto, tal y como se los he dicho siempre, somos simplemente carne de cañón electorero. Pero esto no es todo, esperen ustedes a la llegada de las campañas ¡Dios mío!, nos van declarar casi la guerra para efectos de captación de votos y sino, al tiempo.
Correo: losbuenosdias@gmail.com
Indiscutiblemente ustedes han de haber ya escuchado la leyenda indígena de El Dorado, nombre y mito que incluso ha dado el nombre a un sin fin de obras y objetos, entre ellos a modelos de automóviles. De acuerdo con nuestros ancestros indígenas, contemporáneos, de nuestros también ancestros españoles (a estas alturas del partido negar el mestizaje, así como la benéfica influencia de la cultura hispana sería no una pifia, sino una testarudez a grado de torpeza supina), como se dieron cuenta lo que los españoles buscaban con tanto afán, que hasta torturaban y mataban para la consecución de tal objeto, que no era otra cosa que ¡Oro!, no tardaron mucho en inventar el mito de señalar hacia el norte la existencia de una gran ciudad construida en oro puro, en donde sus habitantes no hacían otra cosa que cargar y construir todo con oro. Esta fabulosa leyenda dio como consecuencia de que los conquistadores se olvidaran de los paupérrimos conglomerados indígenas en donde llegaban y se lanzaran siempre al norte en busca de tan fabulosa cuanto mítica ciudad. Al ver los aborígenes que tal mentira funcionaba, pareciera se telepatearon la versión a manejar, porque de pronto, conforme llegaban al punto donde se presumía estaba El Dorado (nombre dado por los españoles a tan prodigiosa urbe), los habitantes de dicho lugar los mandaban más al norte. En tal forma, que según dicen los conocedores, hay vestigios de la marcha hispana hasta casi llegar a la hoy zona de Los Grandes Lagos, comarca entre los EUA y el Canadá; lógicamente ¡Nunca encontraron nada!
SEGURAMENTE NADIE QUIERE LA VISITA DE OTRO PRESIDENTE
Por lo tanto, en virtud a lo sufrido por los habitantes de la muy tranquila Mérida, Yucatán, con la "grata visita" de Mr. Bush, no me queda la menor duda no les ha de haber quedado la menor alegría por tal visita, sobre todo por la serie de calamidades que esto trajo, más que nada en el sitio bajo el cual estuvo la ciudad antes y durante la mentada visita. Por lo tanto, ni duda me cabe la próxima realizada por otro Presidente de los EUA al país o de algún Jefe del Ejecutivo del Primer Mundo, los habitantes de todas la ciudades del país indiscutiblemente inventarán algo similar a la leyenda de El Dorado, a fin de que la visita se realice en otro lado pero no en la ciudad designada.
¡HIJOLE! TODO UN ESTADO DE SITIO POR TAN INUTIL VISITA
Pues miren que fue espantosa la experiencia vivida por los "boshitos", imagino hasta sus casas debieron ser cateadas, ya no por los mismos mexicanos de las Guardias Presidenciales, sino por los móndrigos gringos que en búsqueda de "terroristas", deben haber "peinado" toda la ciudad ¡Y la escandalera de los helicópteros, los aviones y toda esa espantosa gama de infraestructura de seguridad presentada para protección de Mr. Bush ¡Qué espantoso! Aquí muy bien podemos aplicar y con mucho lo que dice la Biblia, en Proverbios (17, 1): "Es mejor un bocado de pan seco, pero con tranquilidad, que una casa con infinidad de banquetes donde reine la discordia". Indiscutiblemente un Jefe de Estado debe tener seguridad, pero la de Mr. Bush es como para echarse a correr ¿O no? (Así ha de andar su alma).
AHORA VIENE LA PARTE DE "LA CACA DEL PERICO"
Hasta aquí les dejo la parte del título de la "calumnia" correspondiente a "El Dorado". Arrancando con "La caca del perico", esto último en virtud de que tal y como dice el mexicanísimo dicho respecto a tal producto escatológico del loro: "...ni huele ni apesta". Bueno, pues así fue la visita de Mr. Bush al país, pues no hubo nada extraordinario, como tampoco nada que desde los EUA no haya dicho el mayor entrometido del mundo. Pues lo que dijo, no nos benefició ni nos perjudicó, sino todo lo contrario, pues nada se arregló con lo de la migración, como tampoco nada en contra del consumo de la droga, pues ese es el meollo del problema en el narco ¡La gran adicción de la sociedad gringa por todo lo que sea estupefacientes! Y en virtud de ser el mayor y más rico mercado del mundo en tal materia y tener una muy extensa frontera con nuestro país, la bronca del narco en México es generada precisamente por los mafufos allende la frontera norte. Pero, como son los "ricardos" y los "chicos bien", pues nada, que somos los latinos los que estamos haciendo hasta lo imposible por corromperlos y por eso el problema está en el tráfico, no en el consumo.
VISITA QUE NO SIRVIO PARA NADA, PUES TODO QUEDO IGUAL
En fin, que esta visita no sirvió para maldita la cosa, sino para el fastidio de los habitantes de la Blanca Mérida. E indudablemente para una estrategia electoral en beneficio del Sr. Bush, pues el año entrante hay elecciones en gringolandia y como el voto hispano ya está muy duro, él va a decir que la reforma migratoria no pasó por culpa de los demócratas que son ahora mayoría en el Congreso Norteamericano (Bush es republicano), pero, cuando él tuvo mayoría en el Congreso no hizo nada por la mentada reforma. Por lo tanto, tal y como se los he dicho siempre, somos simplemente carne de cañón electorero. Pero esto no es todo, esperen ustedes a la llegada de las campañas ¡Dios mío!, nos van declarar casi la guerra para efectos de captación de votos y sino, al tiempo.
Correo: losbuenosdias@gmail.com
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