¡LLEGARON LOS REYES MAGOS!

¡LLEGARON LOS REYES MAGOS!
¡Que bárbaro!, tengo ya 52 años de existencia y todavía me entusiasma este asunto de los reyes magos. Indiscutiblemente a mí me da mucho más gusto en función que veo sigo conservando de alguna manera algo de mi niñez. Que dicho sea de paso, no debería uno jamás permitir se muriera del todo tal estado anímico dentro de uno, pues, sin lugar a dudas, son los niños los que efectivamente logran disfrutar a plenitud este asunto llamado vida ¿O no?, pues en cuanto se va uno tornando ruco, los convencionalismos nos van moldeando, querrámoslo o no, obligándonos en muchos de los casos perder el sentido del goce y disfrute de la existencia.
TODO IBA BIEN HASTA QUE ME LLEVARON A LA ESCUELA
Por ahí hay una expresión de entre los cientos que de las mismas dejara Mark Twain, el excéntrico escritor norteamericano, crítico contumaz, no sólo del sistema de gobierno de su país, sino de la vida en sí, en donde nos expresa el escritor que él disfrutaba muy bien de la vida y se iba formando estupendamente, acabándose todo esto cuando lo inscribieron en el colegio.
FEOS RECUERDOS DE CUANDO ME DEJARON EN LA ESCUELA
Coincido con Mark Twain, si algo terrible rememoro todavía es cuando mi partida hacia lo que antes se llamaba la "escuela de parvulitos" ¡Nunca me adecué a tal lugar! Hoy, claro, leo de vez en cuando, pero, esto no quiere decir la escuela haya sido lo máximo.
Pero, retornando al tema de Reyes Magos, este día es indiscutiblemente una de las más bellas costumbres y tradiciones que llegan con la colonia, pues hay que ver también la manera en cómo se festeja este día en la Madre Patria. Es altamente simbólico, amén de proclive para los regalos a la gente menuda.
TRADICION CUYA FORTALEZA NO HA SOCABADO SANTA CLOS
Como podemos observar, es tal la fortaleza de la tradición que el famoso personaje regordete, bigotón y canoso, Santa Clos, que llega del norte de Europa vía los EUA, para nada ha logrado desplazar a Don Melchor, Gaspar y Baltasar. Incluso, existe la historia del cuarto rey mago, misma que ya se las he contado en dos ocasiones y se encuentra muy bien documentada en la novela y película de Ben Hur. Obvio, la novela es mucho mejor. Y, no deja de ser un complemento muy bueno al mensaje de paz y amor que el Niño Dios trae el 24 de diciembre y los míticos reyes venidos del oriente confirman al llevarse a cabo la "Epifanía", o sea, la adoración del Niños Dios, en donde de acuerdo con la tradición, estos seres fabulosos traen a Jesús incienso, oro y mirra.
LAMENTABLEMENTE LOS REYES YA NO ME TRAEN NADA
Hoy, lógico, por ruco ya no me traen nada los reyes, pero, sigue siendo altamente emocionante, pero sobre todo gratificante ver a la gente menuda llenarse de alborozo con los presentes que les dejan los reyes. Es todo un acontecer salir a la calle el día seis de enero y ver a los niños regocijadamente disfrutar los juguetes que les trajeron vía caballo, camello y elefante, los regios personajes.
¡LA RIQUISIMA ROSCA DE REYES Y EL MEXICANISIMO CHOCOLATE!
Y ¿Qué me dicen de la otra faceta de esta tradición, en la que de manera por demás activa participamos los adultos? Me refiero a la "rosca de reyes", tradición también importada de España, pero que en México le damos el toque absolutamente original, sobre todo con el clásico chocolate (que aquí si ni quien me trate de desmentir, pues el chocolate, es otro producto de México para el mundo, extraído de la amarga semilla del cacao). ¿Con qué acompañarían antes los españoles la rebanada de rosca, con leche? Pero, es imperdonable el degustar el rico producto del trigo transformado en exquisita rosca, sin una muy buena taza de chocolate.
LLEGA A SU FIN EL MEGAPUENTE
Por cierto, con el corte de la rosca se da por concluido el mega puente Lupe-Reyes, del que les hablé en pasadas "calumnias", que da inicio con las festividades de la Guadalupana, llegando hasta el día de hoy, seis de enero, Día de Reyes, con el corte e ingesta de la rosca. Que además, y no obstante esa tradición ya se perdió, queda el encanto de ver la forma en cómo vamos todos partiendo la rosca para ver si sale o no el "muñeco". Que ya leí por ahí en El Dictamen, que alguien se inconformó en que se le llame "muñeco", pues dice no es tal, sino la representación del Niño Jesús escondido en la rosca, al estar huyendo de Herodes.
Y DE AHI CARNAVAL Y LUEGO SEMANA SANTA
Pero, historias aparte, que se van adaptando muy bien a cada ocasión, es muy bueno el alborozo que se levanta en torno a la "salida" del Niño.
La otra tradición que les cuento se perdió, fue la de armar la fiesta o pachanga, consistente en tamales y atole el dos de febrero, día de la Virgen de la Candelaria. Fecha ésta en que se da inicio a la preparación para la Semana Santa.
¡VAMONOS TODOS A MI HOTEL, LA POSADA DE DOÑA LALA!
Por lo pronto, y superada la rosca, les haya o no tocado "muñeco", si quieren constatar lo que es la festividad de La Candelaria, vayan a Tlacotalpan, para que vean lo que es piel canela en materia de celebración de estas festividades, el pueblo entero se torna en una gigantesca pachanga.

Correo: losbuenosdias@gmail.com

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